Un joven en Florida se quedó parcialmente ciego después de quedarse dormido con sus lentes de contacto y una bacteria carnívora se le comiera uno de sus ojos.
Se trata de Michael Krumholz, de 21 años, estudiante de gestión deportiva de Lake Worth, cerca de Miami, quien tomó una siesta de 40 minutos que resultaría trágica.
El muchacho cuenta que concilió el sueño y no se sacó los lentes, hecho que ocurrió el pasado mes de diciembre. Cuando despertó, su ojo izquierdo estaba rojo y su visión distorsionada.
Pierde vista de un ojo tras dormir con lentes de contacto
Sin embargo, en ese momento no hizo mucho, se sacó los lentes y no le prestó mucha atención. Pero días después comenzaría a perder la vista y a sentir un dolor insoportable.
Después de un mes de incertidumbre, los médicos finalmente le diagnosticaron una infección bacteriana carnívora conocida como queratitis por acanthamoeba.
Krumholz ahora ya no puede ver con su ojo izquierdo, excepto por los colores parpadeantes “negro y gris”, que compara con la estática en un televisor.
Los médicos dicen que es posible que solo pueda recuperar el 10 por ciento de la visión después de un trasplante de córnea, que se daría en los siguientes meses.
El joven ha abierto un recaudo para ello en redes sociales donde aconseja “Si usa lentes de contacto, no duerma con ellos, no nade con ellos y lo que nunca me advirtieron NO SE DUCHE con ellos.”
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