El presidente de Colombia, Gustavo Petro, condenó de manera contundente el ataque perpetrado por el Ejército de Liberación Nacional (ELN) contra una base militar en Puerto Jordán, Arauca. El atentado, que tuvo lugar este martes, dejó un saldo de dos soldados muertos y 27 heridos, generando una profunda preocupación sobre el futuro de las negociaciones de paz que el Gobierno colombiano había iniciado con este grupo guerrillero.
El ataque fue ejecutado con un vehículo cargado de explosivos que detonó en las cercanías de la base militar, una acción que las autoridades atribuyen al ELN. Según el presidente Petro, este atentado “prácticamente cierra un proceso de paz con sangre”, lo que pone en entredicho la continuidad de las conversaciones.
El mandatario destacó la gravedad del atentado, que rememora episodios violentos previos, como el ataque de 2019 en la Escuela de Cadetes General Santander, también atribuido al ELN. Petro subrayó la dificultad de alcanzar una paz estable y duradera en Colombia, señalando que actos como este perpetúan un ciclo de violencia que parece no tener fin.
Gustavo Petro condena ataque del Eln en Arauca: “Cierra un proceso de paz con sangre”
“El ataque que hiere a 27 jóvenes y mata a dos más fue realizado por quienes estaban sentados con nosotros en la mesa de diálogo. Este es un golpe directo al proceso de paz”, afirmó Petro, mostrando su frustración ante la repetición de hechos que socavan los esfuerzos del Gobierno por desescalar el conflicto armado en el país.
Petro fue claro en su mensaje: “Es como si estuviéramos destinados a repetir este ciclo violento una y otra vez, matándonos entre nosotros como si fuera nuestro destino”.
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