El domingo 21 de mayo, un vuelo de Aerolíneas Argentinas que iba a despegar rumbo a Miami fue demorado por una amenaza de bomba. La llamada anónima alertaba de que había tres explosivos en el avión y que iban a volar en mil pedazos.
El hecho provocó un gran operativo de seguridad y pérdidas millonarias para la empresa estatal. La responsable de la amenaza fue identificada como Daniela Carbone, una azafata de la misma compañía que llevaba 25 años trabajando en ella.
¿Qué la motivó a cometer este acto de intimidación pública, entorpecimiento de los servicios públicos y coacción agravada?, las autoridades están cerca de descubrirlo.
Amenaza de bomba en un vuelo a Miami: quién es la azafata acusada y qué la impulsó a hacerlo
Según la investigación del juez federal de Lomas de Zamora, Federico Villena, quien hoy le tomará declaración indagatoria, Carbone actuó por celos y venganza.
La mujer había sido novia durante cinco años de otro azafato que iba en el vuelo amenazado, pero él la había dejado hace poco. Al parecer, el hombre tenía una nueva pareja o se iba a encontrar con ella en Miami.
¿Por qué una azafata amenazó con una bomba en un vuelo a Miami?
Para hacer la llamada, Carbone usó el teléfono de su hija, al que le puso un chip prepago. Así logró distorsionar su voz y evitar ser rastreada. Sin embargo, las cámaras de seguridad del aeropuerto y los testimonios de sus compañeros la delataron.
Ahora, la azafata Carbone se enfrenta a una posible pena de prisión y a perder su trabajo. Su acción no solo afectó a los 270 pasajeros y 12 tripulantes del vuelo AR1304 Ezeiza-Miami, sino también a la imagen y la economía de Aerolíneas Argentinas.
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