La Procuraduría (Fiscalía) General de Justicia del estado de Hidalgo (PGJH), en el centro de México, informó este viernes sobre la ejecución de una orden de detención por el asesinato de una doctora en contra de siete policías del municipio de Progreso de Obregón, en la citada entidad.
En un comunicado, la PGJH dijo que la detención de los policías, entre ellos la directora de la corporación, Estefanía Hernández, “derivó de un mandamiento judicial” que solicitó la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos de Género ante la autoridad judicial.
Esto se produce por los hechos ocurridos el 9 de junio en el citado municipio y en los que murió una persona identificada con las iniciales B. H. R. Medios locales han señalado a la víctima con el nombre de Beatriz Hernández Ruia, de 30 años, y médico de profesión.
La institución añadió que los imputados fueron ingresados en el Centro de Reinserción Social de Mixquiahuala de Juárez para, posteriormente, presentarlos en el juzgado correspondiente y determinar su situación legal.
EL CASO
Versiones de amigos, familiares y colegas señalan que la médico fue víctima de violencia policial cuando se encontraba bajo custodia de los policías municipales de Progreso de Obregón después de ser detenida por un accidente automovilístico ocurrido el martes 9 de junio.
Según testigos, la doctora, quien estaba al volante de un coche compacto, se vio involucrada en una colisión junto con otros cuatro vehículos, pero sin heridos graves.
Debido a que el accidente entre automóviles resultó aparatoso, la médico, quien trabajaba en el Hospital General de la ciudad de Actopan, Hidalgo, bajó de su vehículo para intentar ayudar a las personas afectadas, relataron.
Además, señalaron que la mujer asumió su responsabilidad en el choque y había aceptado pagar los daños provocados, pero, sin embargo, resultó detenida con violencia por los policías de Progreso Obregón.
En un video que circula en redes sociales se observa como uno de los agentes sujeta a la mujer por el cuello con fuerza.
El jueves, en un comunicado, el Gobierno municipal de Progreso de Obregón relató que la mujer fue ingresada en el centro de detención, donde fue visitada por su padre, con quien discutió y, posteriormente, “ella decide” colgarse de una galera con un pedazo de tela.
Al ver esta acción, mediante una videocámara, un policía acudió a su auxilio y fue llevada a un hospital de urgencias donde intentaron salvarle la vida y, aunque presentaba signos vitales, “ya no se pudo hacer más por ella”, señaló el boletín.
Debido a estos hechos, la PGEH informó este jueves que abrió una carpeta de investigación por el delito de asesinato ya que el reporte del hospital al que fue llevada la mujer indicó que “cuando los agentes intentaron que fuera recibida, ella ya no tenía signos vitales”.
El 28 de marzo, en el municipio de Tulum, la migrante salvadoreña Victoria Esperanza Salazar fue asesinada por policías mexicanos.
El asesinato de la mujer causó conmoción e indignación internacional debido a que en el caso se pudo atestiguar la misoginia, xenofobia y racismo de las autoridades mexicanas.
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EFE
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— SomosFan.com (@SomosFancom) June 12, 2021
