La Selección Colombia de Fútbol inició su concentración en la ciudad de Cochabamba, Bolivia, como parte de su preparación para el crucial partido de las Eliminatorias Sudamericanas ante Bolivia, que se disputará en la altura de El Alto. El cuerpo técnico, encabezado por Néstor Lorenzo, ha diseñado una estrategia integral para enfrentar los desafíos que plantea jugar a más de 4.000 metros sobre el nivel del mar.
La elección de Cochabamba como punto de partida no es casualidad. Ubicada a 2.558 metros sobre el nivel del mar, esta ciudad permite a los jugadores iniciar un proceso de aclimatación gradual antes de enfrentarse a la altura extrema de El Alto.
Esta estrategia busca minimizar los efectos del mal de altura, un factor que históricamente ha sido un obstáculo para los equipos visitantes en Bolivia.
La Selección Colombia se prepara para el partido más alto de las Eliminatorias
El técnico Néstor Lorenzo ha sido proactivo al convocar a jugadores que militan en equipos que disputan sus partidos en ciudades de altura. Nelson Deossa, extremo del Pachuca de México, y Willer Ditta, defensor de Cruz Azul, aportarán su experiencia en estas condiciones a la Selección Colombia.
La convocatoria de estos jugadores, sumada a la llegada del equipo a Cochabamba varios días antes del partido, demuestra la importancia que el cuerpo técnico le otorga a la adaptación a la altura. La idea es que los jugadores lleguen al partido en El Alto con el menor impacto posible de los efectos fisiológicos de la altitud.
Un desafío de altura
El estadio Municipal de El Alto, ubicado a 4.095 metros sobre el nivel del mar, es uno de los estadios más altos del mundo en los que se disputan partidos de fútbol profesional. La falta de oxígeno y la presión atmosférica reducida representan un desafío físico y psicológico para los jugadores.
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