La Dimayor, entidad encargada del fútbol profesional colombiano, emitió un contundente comunicado en respuesta a las declaraciones del secretario de Gobierno de Medellín, Juan Pablo Ramírez, en las que acusaba a la dirigencia de Atlético Nacional de no haberse reunido con los barristas.
La entidad, liderada por su presidente Fernando Jaramillo, rechazó enérgicamente estas acusaciones y consideró inaceptable culpar al club por los hechos de violencia y vandalismo que tuvieron lugar en el Estadio Atanasio Girardot.
La Dimayor respaldó la decisión de Atlético Nacional de mantenerse firme en su postura, a pesar de las manifestaciones de los violentos, y denunció que se buscaba afectar económicamente al club y pretender incidir en decisiones administrativas legítimas.
Dimayor denuncia intentos de intimidación y rechaza incriminaciones infundadas a Atlético Nacional
La entidad afirmó que permitir que los violentos influyan ilegítimamente en las decisiones de un club profesional, basándose en el temor, sería desconocer los principios de la Constitución Política y hasta coadyuvar en conductas con incidencia penal.
Además, la Dimayor cargó de responsabilidad a las autoridades de la capital antioqueña por los hechos de violencia, destacando que se habían remitido comunicaciones a las autoridades competentes para actuar de manera conjunta y permitir la realización del encuentro deportivo.
Asimismo, hizo hincapié en que la seguridad y el orden público son responsabilidad de las autoridades administrativas y de policía a nivel nacional y local, y no deben trasladarse a los clubes de fútbol profesional ni a los particulares contratados por ellos para brindar servicios de logística.
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