El Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha tomado la decisión de dejar sin efectos disciplinarios la expulsión del jugador Vinicius durante el partido de la trigésima quinta jornada de LaLiga Santander. El comité ha considerado las alegaciones presentadas por el Real Madrid, así como las pruebas videográficas y gráficas aportadas, que indican la existencia de agresiones físicas y verbales hacia el jugador por parte de adversarios y aficionados.
Dejan sin efectos la expulsión a Vinicius en el Valencia-Real Madrid
Según el comité, estas agresiones se enmarcan en una situación de impunidad constante durante toda la temporada, donde diversas acciones de agresión física y verbal han ocurrido ante la pasividad de los árbitros, la RFEF y LaLiga. Además, se destaca que la actuación del árbitro del VAR no puede considerarse un simple “error humano”, ya que la imagen remitida al colegiado fue parcial y sesgada, influyendo en la valoración equivocada de la acción y, por ende, en la injusta expulsión del jugador.
El Comité de Competición también señala la irregularidad de la existencia de dos actas sucesivas, en las cuales solo en la segunda se mencionan los insultos recibidos por el jugador de forma manifiestamente insuficiente. El club alegante ha presentado numerosas pruebas videográficas que demuestran la existencia de cantos racistas y denigrantes, los cuales no fueron mencionados en el acta arbitral. Desde el recibimiento en el estadio, donde se entonó el cántico racista “Vinicius eres un mono”, hasta los insultos durante el partido, como “Puto negro” y otros términos ofensivos, el jugador fue objeto de una agresión verbal inaceptable.
En relación al lance que motivó la expulsión del jugador, el Comité de Competición indica que inicialmente se sancionó con una tarjeta amarilla, pero después de revisar las imágenes proporcionadas por el VAR, el árbitro cambió su decisión y mostró una tarjeta roja. Sin embargo, se señala que el VAR omitió mostrar la agresión sufrida por Vinicius segundos antes, donde jugadores del equipo local lo agarraron del cuello. Ante el riesgo inminente de asfixia, el jugador expulsado intentó deshacerse del jugador rival, siendo interpretado como una agresión.
Además, se ha informado que el árbitro del VAR fue cesado por el corte de las imágenes remitidas al colegiado, lo que añade más elementos a tener en cuenta en este caso.
El Comité de Competición ha concluido que existen pruebas inequívocas que demuestran la inexistencia del hecho reflejado en el acta arbitral y la arbitrariedad de la decisión. Por tanto, se ha decidido dejar sin efectos disciplinarios la expulsión de Vinicius.
Esta decisión pone de manifiesto la importancia de abordar el problema de la discriminación y el racismo en el fútbol, así como la necesidad de garantizar la integridad y la imparcialidad en las decisiones arbitrales. El Comité de Competición ha demostrado su compromiso en la lucha contra estos actos y en salvaguardar la justicia en el deporte.
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