El fútbol es un deporte que no suele cambiar mucho sus reglas, pero a partir de la próxima temporada podriamos tener una novedad que podría alterar el juego tal y como lo conocemos: las tarjetas azules. Se trata de una nueva sanción que expulsará a los jugadores del campo durante 10 minutos si cometen una falta cínica o muestran desacuerdo con el árbitro. ¿Qué objetivo tiene esta medida y cómo se aplicará? Te lo contamos en este artículo.
¿Qué son las tarjetas azules?
Las tarjetas azules son una nueva sanción que se introducirá en el fútbol a partir de la temporada 2024-2025. El organismo legislativo del juego, la Junta Internacional de la Asociación de Fútbol (Ifab), ha aprobado lo que sería la primera tarjeta nueva que se utilizará en este deporte desde la llegada de las tarjetas amarillas y rojas en la Copa Mundial de 1970.
La medida revolucionaria será anunciada por Ifab como parte de los protocolos sin-bin que expulsarán a los jugadores del campo durante 10 minutos si cometen una falta cínica o muestran desacuerdo con un árbitro del partido.
El nuevo protocolo anunciado el viernes limitará la nueva tarjeta a faltas que impidan un ataque prometedor y disidencia, además de confirmar que un jugador debe recibir una tarjeta roja si recibe dos tarjetas azules durante un partido o una combinación de amarilla y azul.
¿Qué objetivo tiene esta medida?
El objetivo de esta medida es reducir el número de faltas tácticas que cortan el ritmo del juego y evitar las protestas excesivas que generan tensión y pérdida de tiempo. Según Ifab, las tarjetas azules pretenden “promover el juego limpio, el respeto y la deportividad” y “aumentar el disfrute de los espectadores”.
Además, se espera que esta medida tenga un efecto disuasorio sobre los jugadores, ya que una expulsión temporal puede suponer una gran desventaja para su equipo, sobre todo si se produce en momentos clave del partido. Así, se busca que los jugadores sean más responsables de sus acciones y se eviten situaciones conflictivas.
Para mostrar una tarjeta azul, el árbitro deberá detener el juego y señalar al jugador infractor, que deberá abandonar el campo por una zona específica y dirigirse al área sin-bin, donde permanecerá durante 10 minutos. El árbitro indicará con su reloj el inicio y el final de la sanción. Durante ese tiempo, el jugador no podrá ser sustituido por otro compañero, por lo que su equipo jugará con un jugador menos.
Si un jugador recibe dos tarjetas azules durante un partido o una combinación de amarilla y azul, será expulsado definitivamente y su equipo no podrá reemplazarlo. Además, el jugador sancionado podrá recibir una suspensión adicional según el reglamento de cada competición.
¿Qué opinan los expertos y los aficionados?
La introducción de las tarjetas azules ha generado opiniones encontradas entre los expertos y los aficionados del fútbol. Algunos consideran que es una medida positiva que favorecerá el espectáculo y la justicia deportiva, mientras que otros creen que es una medida innecesaria que complicará el juego y lo hará más arbitrario.
Entre los defensores de las tarjetas azules se encuentran algunos exárbitros como Pierluigi Collina o Howard Webb, que han manifestado su apoyo a esta iniciativa. Según ellos, las tarjetas azules ayudarán a los árbitros a controlar mejor el partido y a sancionar de forma proporcional las faltas que no merecen una tarjeta roja pero que sí perjudican al juego.
Entre los detractores de las tarjetas azules se encuentran algunos entrenadores y jugadores, que han expresado su rechazo a esta medida. Según ellos, las tarjetas azules supondrán una interferencia excesiva en el juego y una pérdida de identidad del fútbol. Además, temen que esta medida pueda generar más polémica y confusión, ya que dependerá mucho del criterio del árbitro y de la interpretación de las faltas.
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