La jueza Laura Graciela Bruniard del Juzgado Criminal y Correccional N°34 procesó en las últimas horas a los cinco acusados por la muerte del ex cantante de One Direction, Liam Payne, ocurrida el 16 de octubre en Buenos Aires. El músico falleció al caer desde el tercer piso del Hotel CasaSur, en el barrio de Palermo. De los cinco procesados, dos enfrentan prisión preventiva.
Braian Paiz, ex camarero de 24 años, y Ezequiel Pereyra, empleado del hotel, fueron citados para presentarse en el juzgado dentro de 24 horas hábiles, mientras que se les embargó por 5 millones de pesos. Ambos están acusados de suministro de estupefacientes a Payne en dos ocasiones previas a su muerte. Los chats entre Paiz y Payne revelaron que el cantante solicitó y recibió cocaína en los días previos al trágico suceso.
Por su parte, el empresario Roger Nores fue imputado por homicidio culposo sin pedido de detención, aunque se le embargó por 50 millones de pesos y se le prohibió salir del país.
Justicia argentina procesa a los responsables de la muerte de Liam Payne en Buenos Aires
La jueza también procesó a la gerenta del hotel, Gilda Martín, y al encargado, Esteban Grassi, ambos acusados de homicidio culposo por no haber solicitado ayuda a tiempo durante la crisis de salud mental que sufrió Payne antes de su caída.
La causa se vio reforzada por los resultados de la autopsia, que confirmaron que Payne murió por politraumatismos y hemorragias internas, producto de una caída desde gran altura.
Los exámenes toxicológicos arrojaron rastros de alcohol, cocaína y un antidepresivo en su organismo, sugiriendo que el cantante estaba bajo el efecto de drogas cuando ocurrió el incidente. Además, se descartó cualquier intervención de terceros en la caída, lo que sugiere que Payne podría haberse precipitado en un estado de semiinconsciencia.
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