Los gatos son animales muy inteligentes y curiosos, pero también tienen sus instintos naturales que a veces pueden causar problemas en el hogar.
Uno de ellos es el de rascar con sus uñas diferentes superficies, como el sofá, las cortinas o la alfombra. Esto les sirve para afilarse las uñas, estirar los músculos, liberar estrés y marcar su territorio con su olor.
Sin embargo, este comportamiento puede ser muy molesto y dañino para los dueños de los gatos, que ven cómo sus muebles se deterioran y su casa se llena de arañazos.
Cómo conseguir que tu gato prefiera el rascador a tus muebles
¿Qué se puede hacer para evitarlo? La solución más efectiva es enseñarlo a usar un rascador, un objeto diseñado especialmente para satisfacer su necesidad de rascar sin perjudicar el mobiliario.
En este artículo te vamos a dar algunos consejos prácticos para entrenarlo a usar el rascador y evitar que tus muebles sean destrozados. Verás que con paciencia, constancia y refuerzo positivo podrás lograrlo.
¿Qué tipo de rascador elegir?
Existen muchos tipos de rascadores en el mercado, de diferentes tamaños, formas, materiales y precios. Lo importante es que elijas uno que se adapte a las preferencias y características de tu gato. Algunos aspectos que debes tener en cuenta son:
– La altura: el rascador debe ser lo suficientemente alto como para que él pueda estirarse por completo al rascar. Esto suele ser entre 60 y 80 cm, dependiendo del tamaño de tu mascota.
– La estabilidad: el rascador debe ser firme y resistente, para que no se tambalee ni se caiga cuando el gato lo use. Puedes fijarlo al suelo o a la pared si es necesario.
– El material: el rascador debe estar hecho de un material que sea agradable y duradero para las uñas del gato. Los más comunes son el sisal, la cuerda o el cartón.
– La ubicación: el rascador debe estar situado en un lugar accesible y visible, preferiblemente cerca de donde suele rascar o dormir. También debe estar alejado de zonas ruidosas o con mucho tráfico de personas o animales.
¿Cómo enseñar al gato a usar el rascador?
Una vez que tengas el rascador adecuado, debes enseñarle a tu gato a usarlo. Para ello, puedes seguir estos pasos:
– Acostumbra al gato al rascador: lo primero que debes hacer es presentarle el rascador a tu gato y dejar que lo explore por sí mismo. Puedes ponerle algún juguete o golosina encima para llamar su atención y motivarlo a subirse.
– Dale ejemplo: puedes rascar tú mismo el rascador con tus manos o uñas, haciendo un sonido audible y dejando una marca visible. Esto le mostrará lo que se espera que haga y le despertará su curiosidad e imitación.
– Guía al gato al rascador: puedes coger sus patitas con suavidad y hacer el gesto de rascar sobre el rascador, sin forzarlo ni asustarlo. También puedes frotar sus patas con un poco de catnip o hierba gatera, una planta que les atrae mucho por su olor.
– Prémialo cuando use el rascador: cada vez que veas que usa el rascador por su cuenta, debes felicitarlo con palabras cariñosas, caricias o golosinas. Así le estarás reforzando positivamente y le estarás enseñando que ese comportamiento tiene una recompensa.
– Protege tus muebles mientras tanto: mientras tu gato aprende a usar el rascador, puedes proteger tus muebles con fundas, mantas o cinta adhesiva de doble cara.
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