Una ola de horror ha sacudido a Haití tras la masacre de al menos 184 personas en el barrio de Cité Soleil. Según informes de la ONG CDP-Haití, el líder de una poderosa banda criminal, conocido como “Rey Mikano”, ordenó la ejecución de estas personas, en su mayoría ancianos, como parte de un ritual satánico.
La masacre, que se prolongó durante tres días, entre el viernes y el sábado, fue desencadenada por la enfermedad del hijo del líder de la banda. Tras consultar a un sacerdote vudú, Mikano culpó a los ancianos de la comunidad de haber lanzado un maleficio sobre su hijo. Cegado por la ira y la superstición, ordenó a sus hombres asesinar a todos los ancianos y practicantes de vudú del barrio.
Las víctimas fueron atacadas brutalmente con cuchillos y machetes, y sus cuerpos fueron mutilados y quemados. Según testigos, los sicarios persiguieron a sus víctimas por las calles, sembrando el terror en la comunidad.
Líder de banda ordena masacre en Haití por culpa de la brujería
Nuevos detalles sobre la masacre revelan que las víctimas fueron sacrificadas como ofrenda a un espíritu del panteón vudú al que servía el líder de la banda. Sin embargo, el ritual salió mal, ya que el espíritu rechazó los animales ofrecidos como sacrificio y exigió víctimas humanas.
Al respecto, el primer ministro haitiano, Alix Didier Fils-Aimé, calificó la masacre como un “acto bárbaro de crueldad insoportable”. La Organización de las Naciones Unidas también ha expresado su profunda preocupación por esta situación y ha llamado a llevar a los responsables ante la justicia.
Cabe reseñar que la creencia en la magia y la brujería es muy arraigada en la cultura haitiana, y a menudo se utiliza para justificar actos violentos. En este caso, la superstición del líder de la banda se convirtió en una excusa para cometer una masacre de proporciones históricas.
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