La Policía tunecina detiene a destacados políticos y empresarios del país

La Policía tunecina detuvo este sábado a un influyente empresario cercano al expresidente Zine El Abidine Ben Ali, Kamel Eltaief; un exalto cargo del partido islamista, Abdelhamid Jelassi; y el antiguo dirigente del partido Attakatol, Khayam Turki, por motivos desconocidos mientras la oposición denuncia una política represiva.

El magnate de la construcción, de 68 años, fue arrestado por la policía en su casa de la capital tunecina, aunque su abogado aseguró desconocer los motivos de su detención.

Eltaief Participó en el golpe de Estado de 1987 contra el entonces presidente Habib Bourguiba y quedó excluído del círculo de poder durante el régimen de Ben Ali hasta que fue investigado en 2012 por «conspiración contra la seguridad del Estado», caso que se archivó dos años más tarde.

Por su parte, Abdelhamid Jelassi, de 63 años, ocupó el cargo de vicepresidente de Ennahda -uno de los principales actores de la actual oposición- hasta su retirada de la política en 2020. Pasó cerca de 17 años en prisión por su actividad política, principalmente durante la clandestinidad del partido, legalizado en 2011.

En el caso de Turki, de 58 años, dirigió la formación socialdemócrata Ettakatol -socio de Ennahdha durante el gobierno de la Troika (2011-2014)- y destacó como posible candidato a la jefatura del Gobierno tras la dimisión del ex primer ministro Elyes Fakhfakh en 2020. En 2018 fundó el laboratorio de ideas Joussour sobre la transición democrática.

Según su abogado, Abdelaziz Essid, Turki fue «detenido por agentes de seguridad tras una redada policial en su casa, que fue registrada antes de llevarlo a un destino desconocido».

En un comunicado, Ennahda denunció que «la autoridad golpista está tratando desesperadamente de salir de su impasse asfixiante y su flagrante incapacidad para administrar la tareas más básicas del Estado (…) a través de secuestros, desapariciones forzadas, casos judiciales fabricados y acusaciones de delitos terroristas contra el Estado y conspiraciones».

En julio de 2021 el presidente Kais Said se hizo con plenos poderes- que incluyó el cese del primer Ministro y la suspensión del Parlamento- para «preservar la paz social».

Una iniciativa que la mayoría política calificó de «golpe de Estado», mientras que algunas formaciones lo consideraron una «rectificación» del proceso revolucionario.

Desde entonces la Justicia civil y militar ha abierto numerosas investigaciones y ha adoptado medidas cautelares -arrestos domiciliarios y prohibición de abandonar el país- contra altos cargos de instituciones, magistrados, hombres de negocios y diputados por supuestos casos de corrupción y otros ligados a la libertad de expresión.

Camioneta llena de droga terminó en una zanja mientras huía de la policía

EFE

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *