La incertidumbre en torno a la compra de Activision Blizzard por parte de Microsoft continúa creciendo, y ahora se plantea la posibilidad de que la compañía cierre sus operaciones en el Reino Unido si el veto impuesto por la Autoridad de Competencia y Mercados (CMA) no se revierte. Brad Smith, presidente de Microsoft, se reunirá con funcionarios británicos en los próximos días para discutir esta situación y explorar posibles soluciones.
Presidente de Microsoft, se reúne con funcionarios británicos para abordar el veto a la adquisición de Activision Blizzard
Según informes de Bloomberg, Smith tiene programada una reunión con Jeremy Hunt, Canciller de la Hacienda del Reino Unido, quien previamente ha expresado su desacuerdo con la decisión de la CMA de bloquear la adquisición. Durante el encuentro, se especula que Smith podría plantear escenarios extremos que Microsoft estaría dispuesta a considerar si el fallo de los reguladores no se revierte.
Se mencionan dos posibles casos. En primer lugar, Microsoft podría ignorar el bloqueo impuesto por los reguladores y seguir adelante con la adquisición valorada en casi 69.000 millones de dólares. En segundo lugar, Activision Blizzard podría cerrar sus operaciones en el Reino Unido para evitar las restricciones impuestas por la CMA.
Sin embargo, es importante destacar que la reunión de Smith con funcionarios británicos no garantiza una resolución favorable para Microsoft. Además, el presidente de Microsoft se enfrenta a críticas por sus declaraciones posteriores al veto de la CMA, donde afirmó que la Unión Europea era un lugar más atractivo para hacer negocios que el Reino Unido, lo que generó descontento y afectó la confianza en la tecnología británica.
En caso de que Microsoft retire a Activision Blizzard del Reino Unido, aunque esto sería una medida extrema, los jugadores aún podrían acceder a los juegos de la compañía. Si Activision Blizzard se reubica en otro país europeo, podría continuar ofreciendo sus títulos en el Reino Unido a través de un distribuidor. No obstante, la salida de la compañía tendría consecuencias económicas y laborales negativas para el Reino Unido, ya que la empresa tiene una importante presencia y operaciones en el país.
Actualmente, Microsoft ha apelado el veto de la CMA y espera que se revierta la decisión. Aunque existen opciones intermedias para evitar un cierre en el Reino Unido, como la creación de una entidad independiente de Activision Blizzard que cumpla con las regulaciones de la CMA, aún no se ha tomado una decisión definitiva. Es probable que pasen varios meses antes de que se alcance una resolución en este complejo conflicto.
¡Síguenos en Google News, Facebook y Twitter para mantenerte informado con las mejores noticias!