Microsoft ha presentado formalmente una apelación contra el veto impuesto por la Comisión de Mercados y Competencia (CMA) británica a la compra de Activision Blizzard. Según informes de Bloomberg, la compañía con sede en Redmond ha realizado la presentación correspondiente ante el Tribunal de Apelaciones de Competencia del Reino Unido dentro del plazo establecido.
Microsoft busca cambiar la postura de los reguladores en la adquisición de Activision Blizzard
Este proceso de apelación dará inicio a una revisión que podría prolongarse hasta 9 meses. En caso de que los jueces decidan a favor de Microsoft, el caso será devuelto a la CMA para una nueva revisión. Los estadounidenses esperan lograr un cambio de postura por parte de los reguladores y obtener la aprobación para asumir el control de Activision Blizzard, la editora de reconocidas franquicias como Call of Duty y World of Warcraft.
El panorama futuro resulta interesante, considerando que la Autoridad de Competencia y Mercados del Reino Unido objetó la adquisición valorada en 68.700 millones de dólares debido a la preocupación de que Microsoft obtuviera una ventaja anticompetitiva en el mercado de los juegos en la nube. Sin embargo, Microsoft ha negado estas acusaciones, asegurando que su objetivo es llevar sus títulos, incluidos los de Activision Blizzard, a la mayor cantidad de plataformas posible, sin importar si compiten con Xbox Cloud Gaming.
Recientemente, Microsoft ha demostrado su disposición a expandir su alcance en diferentes plataformas. La semana pasada, lanzó el primer juego de PC de Xbox Games Studios, Gears 5, en NVIDIA GeForce Now, y se espera que más títulos lleguen en las próximas horas. Además, se anunció que los primeros juegos de la compañía estarán disponibles en Boosteroid, otra plataforma de juegos en línea, a partir de junio. También se espera que entre en vigencia un acuerdo firmado con la empresa española Nware.
Microsoft confía en que estos acuerdos y acciones persuadirán a la CMA a cambiar su opinión y aprobar la adquisición de Activision Blizzard. Sin embargo, el panorama se presenta desafiante.
La aprobación británica es crucial para Microsoft en su objetivo de completar la compra de Activision Blizzard. Aunque la compañía ya ha superado un obstáculo regulatorio importante al obtener la aprobación de la Comisión Europea, el Reino Unido ha expresado su desacuerdo con esta decisión. Es poco probable que cambie de postura en cuanto a la adquisición de Activision Blizzard.
Los reguladores británicos declararon: “Las propuestas de Microsoft […] reemplazarían un mercado libre, abierto y competitivo por uno sujeto a la regulación continua de los juegos que vende Microsoft, las plataformas a las que los vende y las condiciones de venta. Esta es una de las razones por las que el panel independiente de la CMA impidió este acuerdo. Si bien reconocemos y respetamos que la Comisión Europea tiene derecho a adoptar un punto de vista diferente, la CMA mantiene su decisión”.
Microsoft se enfrenta a un desafío significativo para cerrar el acuerdo. En caso de recibir otro rechazo, la compañía deberá explorar posibles alternativas para no poner todo en riesgo. Se ha especulado que Activision Blizzard podría crear una entidad independiente en el Reino Unido que cumpla con los requisitos de los reguladores. Sin embargo, la intención principal sería evitar tener que tomar este camino. La cuestión clave radica en el hecho de que la CMA nunca ha revertido una decisión frente a un caso revisado por el Tribunal de Apelaciones de Competencia.
Mientras tanto, en Estados Unidos, Microsoft también se enfrenta a desafíos legales por parte de la Comisión Federal de Comercio (FTC) para obtener la aprobación de la adquisición de Activision Blizzard. Dado que el juicio entre las partes no comenzaría antes de agosto, es poco probable que haya novedades hasta finales de año, como fecha más optimista.
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