Proteger el patrimonio cultural del impacto del cambio climático y que la cultura desempeñe un papel fundamental en la recuperación global tras la crisis del coronavirus son los dos puntos cruciales que los ministros del ramo del G20 han acordado en la declaración final, tras la reunión de dos días que han mantenido en Roma.
La cita se celebró bajo la presidencia de turno de Italia y el ministro de Cultura del país anfitrión, Dario Franceschini, subrayó en rueda de prensa que la declaración de 32 puntos, apoyada por unanimidad, marca un antes y un después en la historia del G20 (grupo de países industrializados y emergentes), pues por primera vez este foro tradicionalmente económico ha dado un espacio protagonista a la cultura.
La apertura del encuentro, el jueves, tuvo lugar en el Coliseo y contó con la intervención del primer ministro italiano, Mario Draghi, al que Franceschini dio las gracias porque “con su presencia ha demostrado la importancia que tiene la cultura y la importancia que da Italia a la cultura en las relaciones económicas e internacionales”.
Subrayó que sus homólogos del G20 acordaron seguir demostrando su respaldo a la cultura y a los trabajadores del sector el próximo año, bajo la presidencia de Indonesia, porque “la cultura es un gran factor de crecimiento y de creaciones de oportunidades, especialmente para las generaciones jóvenes y más vulnerables”.
El G20 de Cultura reunió en la capital italiana a personalidades como la ministra francesa de Cultura, Roselyne Bachelot, y la secretaria de Estado alemana de Política Cultural Internacional, Michelle Müntefering, pero también a responsables de organizaciones internacionales como la Unesco, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la Unión por el Mediterráneo o la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).
LA CULTURA COMO MOTOR DE LA REGENERACIÓN
Entre los puntos aprobados en la declaración se encuentra el que reconoce a la cultura como motor de la regeneración y crecimiento sostenible y equilibrado.
También el texto acentúa la importancia de las tecnologías y la necesidad de facilitar el acceso de todos a la cultura, promoviendo la diversidad y la inclusión.
Asimismo, los ministros alentaron a proteger el patrimonio cultural frente a calamidades, desastres naturales, trafico ilícito y terrorismo y pidieron a los gobiernos “reconocer la cultura como parte integral de agendas políticas” y considerar el papel que puede jugar en “las estrategias nacionales e internacionales de recuperación pospandémica”.
ESPAÑA DEFIENDE EL PAPEL DE LA CULTURA CONTRA EL CAMBIO CLIMÁTICO
A la cita también asistió el ministro español de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, ya que España es país invitado permanente del G20.
En un vídeo, Iceta calificó esta cumbre de “histórica” y dijo que “ha habido un espíritu de colaboración entre todos los gobiernos presentes” y también “una presencia muy relevante de la Unesco”, la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.
“Salimos de Roma con más ganas que nunca de volver, no a la normalidad, sino a una situación todavía mejor, a un renacimiento cultural que, desde luego, empezará acabada la pandemia en 2022”, añadió.
Aseguró que en la reunión hubo un esfuerzo de todos los países para proteger el patrimonio cultural global “de los expoliadores y de los que no respetan los derechos de autor”.
De forma paralela, el Ministerio de Cultura y Deporte español indicó en un comunicado que Iceta defendió en su intervención de este viernes el papel de la cultura en la lucha contra el cambio climático y el impacto de este en el patrimonio cultural.
Por eso, incidió en que “gobernantes, instituciones internacionales y sociedad civil” deben dar “una respuesta urgente para contribuir a frenar el calentamiento global”.
También argumentó que con la cultura se debe conseguir “adaptar el comportamiento de todos para la consecución de un modelo social y económico que sea cada vez más respetuoso con la diversidad, más inclusivo y más sostenible”.
Y recordó acciones emprendidas por el Gobierno de Pedro Sánchez en esta dirección, como la organización en Madrid de la Cumbre del Clima en 2019, en la que el Instituto del Patrimonio Cultural de España (IPCE) organizó la jornada “Cambio climático y Patrimonio” con el fin de detectar acciones concretas para proteger el Patrimonio con más eficacia, y definir la implantación del mandato de la Agenda 2030.
La UE quiere plantar 3.000 millones de árboles contra el cambio climático
EFE
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