Sequía y viento dificultan la extinción de un gran incendio en Cuba

El Cuerpo de Guardabosques, los bomberos y otras fuerzas intentan este martes contener el gran incendio que afecta desde el sábado la zona montañosa de Pinares de Mayarí, en la provincia cubana de Holguín (noreste).

El siniestro, que afecta unas 100 hectáreas, no ha podido ser controlado aún por el fuerte viento y la prolongada sequía imperante en la región, dijeron las autoridades cubanas.

«El asentamiento de La Mensura, compuesto por unas 20 viviendas, así como las instalaciones del Centro de Investigaciones de las Montañas, eran los más asediados por la cercanía del fuego, motivo por el cual en los alrededores se han intensificado las labores de extinción», según el diario oficial Granma.

El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, aseguró en Twitter que «los pobladores del lugar se han puesto a salvo del humo y de las llamas».

Reportes de medios locales indican que hoy «será decisivo evitar el avance del incendio hacia las profundidades del parque natural Mensura-Piloto, en especial hacia las zonas de Pinalito, rica en plantaciones de pinos y café».

Ese Parque Nacional Mensura-Piloto ocupa un área superior a las 8.480 hectáreas y en el mismo se localizan especies endémicas de la flora y la fauna cubana.

Hace unas semanas, se desató otro incendio forestal que causó severos daños en más de 1.000 hectáreas de bosques en el municipio Mayarí, también en un área montañosa de Holguín.

Cuba registró en enero de este año más de 80 incendios forestales, una elevada cifra para ese mes, según el Cuerpo de Guardabosques de la isla.

En ese período detectaron que las zonas más afectadas por los fuegos forestales fueron las provincias de Pinar del Río (occidente) y Guantánamo (oriente).

En 2022, Cuba reportó un total de 284 incendios forestales que afectaron más de 1.800 hectáreas de bosque, el mejor registro de los últimos tres años, y de ellos el 90 % fueron provocados, según el Cuerpo de Guardabosques.

El origen de buena parte se atribuye a las quemas no autorizadas de hierbas o caña de azúcar, el empleo de vehículos sin malla matachispas y también la actividad de los cazadores furtivos.

El período crítico de incendios forestales en la isla abarca del 1 de enero al 31 de mayo, coincidente con la época de mayor sequía.

Para este año, según estimados oficiales y por índices de frecuencia, se prevén de 320 a 445 incendios forestales, que pudieran dañar de 4.300 a 6.000 ha en el período de enero a mayo próximo.

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EFE

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