En medio de un pronunciamiento ante la Policía Nacional, el presidente Gustavo Petro expresó su desacuerdo con el reciente informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), que reporta un incremento en los cultivos de hoja de coca y en la producción de cocaína en Colombia.
“El informe dice que la productividad de la hoja de coca se duplicó en un año; eso es lo que me da dudas porque no he observado ningún cultivo en el mundo que en un año se duplique”, afirmó Petro. El presidente sugirió que los datos de la ONU podrían presentar inconsistencias, planteando dudas sobre la metodología empleada para llegar a esas conclusiones.
El informe, publicado recientemente por el Sistema Integrado de Monitoreo de Cultivos Ilícitos de la UNODC, muestra que la producción de cocaína alcanzó las 2.664 toneladas métricas en 2023, y que las áreas sembradas de hoja de coca crecieron un 10%, llegando a 253.000 hectáreas, en comparación con las 230.000 del año anterior.
Cultivos de coca en Colombia: Petro cuestiona cifras de la ONU y pide cambio de política
Esta situación se agrava en al menos 16 departamentos del país, siendo Cauca y Nariño los más afectados. Además, un 48% de estos cultivos están en territorios de manejo especial, como Parques Nacionales y reservas indígenas, lo cual plantea retos adicionales para su erradicación.
Petro enfatizó en la necesidad de replantear la política de lucha contra el narcotráfico, señalando que las incautaciones actuales son insuficientes frente a la capacidad de producción del narcotráfico. “Cada vez incautamos menos de lo que se produce”, afirmó el presidente.
En sus palabras, el problema del consumo de cocaína ha trascendido a nivel global, y la guerra contra las drogas, tal como se ha llevado hasta ahora, solo ha dejado un saldo trágico para la sociedad colombiana.
“Es necesario un cambio de estrategia, de táctica y de relaciones internacionales. Este es un problema de toda América, y si no cambiamos nuestra política, vamos a seguir sacrificando vidas colombianas en una guerra que no termina”, concluyó el presidente.
El informe también reveló que el 89,5% de los cultivos de coca permanecen en los mismos territorios donde han existido durante la última década, reflejando la persistencia del problema y la dificultad para erradicar estos cultivos en áreas de difícil acceso y control estatal.
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