El pasado viernes 28 de abril, la población de Cleveland, en Texas, fue escenario de una terrible masacre. Cinco personas, incluido un niño de 9 años, fueron asesinadas a tiros por un vecino identificado como Francisco Oropesa.
El sospechoso huyó de la escena del crimen y se inició una intensa búsqueda por parte de las autoridades locales y federales. Durante cuatro días, Oropesa logró evadir a la justicia y se refugió en diferentes lugares.
Finalmente, el martes en la noche, agentes del FBI y del condado San Jacinto lo localizaron y arrestaron en la población de Cut and Shoot, a unos 40 kilómetros de Cleveland.
Se reveló en conferencia de prensa que Francisco Oropesa estaba escondido en un armario de una vivienda y no opuso resistencia al ser detenido.
El arma con la que Francisco Oropesa masacró a cinco personas en Texas fue recuperada por las autoridades
Según el subalguacil del condado San Jacinto, Tim Kean, el arresto se produjo gracias a una llamada anónima a la línea de pistas del FBI, que resultó ser veraz. El informante dio detalles sobre el paradero de Oropesa y su posible conexión con otras personas.
En efecto, este miércoles se conocieron al menos cuatro nuevos arrestos relacionados con el caso. Una de las personas detenidas es Divimara Nava Lamar, quien enfrenta cargos de intento de ocultamiento de una persona buscada por las autoridades.
Aunque en su archivo personal aparece como “no casada”, se sospecha que Nava podría ser la pareja de Francisco Oropesa. La vivienda donde residía el acusado aparece a nombre de ambos, según informó Kean.
De las otras personas arrestadas no se han revelado sus identidades ni sus vínculos con Oropesa. Tampoco se han especificado los cargos que enfrentan. Oropesa, por su parte, enfrenta cinco cargos de homicidio y se le fijó una fianza de $5 millones.
El subalguacil Kean también indicó que las autoridades creen haber recuperado el arma con la que se cometieron los homicidios, pero un examen de balística determinará si efectivamente fue la usada para disparar contra las cinco víctimas.
Las motivaciones del crimen aún no están claras. Según algunos testigos, Oropesa tenía problemas con algunos vecinos. Sin embargo, esta versión no ha sido confirmada oficialmente.
Las víctimas fueron identificadas como Randy Horn (54 años), Ashley Horn (27 años), Ranley Horn (15 meses), Carlos Delaney (74 años) y Lynda Delaney (72 años). Todos eran residentes del mismo complejo de apartamentos donde vivía Oropesa.
Lea también: El mexicano Francisco Oropesa, sospechoso de asesinar a 5 hondureños en Texas, fue capturado
¡Síguenos en Google News, Facebook y Twitter para mantenerte informado con las mejores noticias!
